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23 ago 2011



                        LECTURA ORANTE DE LA PALABRA (LD)
Mateo 16, 21-27
Domingo 28 de Agosto de 2011
 
ORACION:
Invocamos al Espíritu Santo para que nos guíe en este encuentro con el Señor Jesús en su Palabra.
Espíritu Santo, eres viento:
llévame donde quieras;
eres brisa: déjame respirar lo nuevo;
eres fuerza: levántame del suelo;
eres vida: dame pasión por la vida;
eres alimento: nútreme de tu savia;
eres luz: ilumíname con tus rayos;
eres calor: calienta mi existencia;
eres libertad: hazme libre;
eres fecundidad: cúbreme con tu sombra;
eres agua viva: dame de beber;
eres respuesta: dame fuerza para decir sí
al Padre, al Hijo y a ti, Espíritu Santo.
Amén.

1)     LECTURA:   ¿Qué dice el texto?
A.     INTRODUCCION:   Continuamos caminando con la guía de Mateo.  En este texto Jesús explica a sus discípulos su decisión: «tenía que ir a Jerusalén», era necesario anunciar la Buena Noticia de Dios y su proyecto de un mundo más justo, en el centro mismo de la religión judía. Era peligroso. Sabía que «allí iba a padecer mucho». Confiaba en el Padre: «resucitaría al tercer día».
Pedro se rebela ante lo que está oyendo, él piensa en un Mesías triunfante. Por eso, lo toma aparte y se pone a reprenderle: «No lo permita Dios, Señor. Eso no puede pasarte».
Jesús reacciona con una dureza inesperada. Este Pedro le resulta desconocido y extraño. No es el que poco antes lo ha reconocido como "Hijo del Dios vivo". Es muy peligroso lo que está insinuando. Por eso lo rechaza con toda su energía: «Apártate de mí Satanás». El texto dice literalmente: «Ponte detrás de mí». Ocupa tu lugar de discípulo y aprende a seguirme. No te pongas delante de mí desviándonos a todos de la voluntad del Padre.
Seguir los pasos de Jesús siempre es peligroso. Quien se decide a ir detrás de él, termina casi siempre envuelto en tensiones y conflictos. Será difícil que conozca la tranquilidad. Sin haberlo buscado, se encontrará cargando con su cruz. Pero se encontrará también con su paz y su amor inconfundible. Los cristianos no podemos ir delante de Jesús sino detrás de Él.
  1. LEER EL TEXTO: Mateo 16,21-27: Leemos este texto de Mateo con mucha atención, tratando de descubrir el mensaje de fe que el Evangelista quiso transmitir a su comunidad.  Releerlo una segunda vez, pausadamente.

  1. Un momento de silencio orante: Hacemos un tiempo de silencio para que la Palabra de Dios pueda entrar en nosotros e iluminar nuestra vida. Terminar cantando: “Tu Palabra me da Vida”.

  1. ¿Qué dice el texto?

>        ¿Qué versículo o parte del texto te impresionó más? ¿Por qué?
>        ¿Qué dice Jesús sobre el futuro que le espera en Jerusalén? ¿Cuál es la reacción de Pedro?
>        ¿Cómo responde Jesús a Pedro?
>        ¿Cuáles son las condiciones que presenta Jesús para seguirle?
>        ¿Cómo recompensará Dios a los seres humanos cuando venga?

2)     MEDITACION: ¿Qué nos dice el texto hoy a nuestra vida?

No es necesario responder a cada pregunta. Seleccionar las más significativas para el grupo.  Lo importante es conocer y profundizar el texto, reflexionarlo y descubrir su sentido para nuestra vida.

*          El papel que representó Pedro, tratando de disuadir a Jesús de seguir su camino por temor a la cruz, se juega en la vida de mucha gente o a veces también en nosotros(as).  Comentar.
*          La decisión que tomó Jesús, que fue la de desestimar las palabras de Pedro y seguir con firmeza su camino, nos toca a nosotros(as) tomarla. ¿En qué situaciones, o respecto a qué desafíos hemos de tomar con firmeza la decisión de Jesús?
*          Jesús fue fiel a su misión de comunicar la Buena Noticia del Reino de Dios hasta las últimas consecuencias asumiendo la cruz. Nosotros: ¿Estamos dispuestos a enfrentar el sufrimiento y la cruz en el proceso de identificación con la vida y la causa de Jesús? ¿Por qué? ¿Qué nos falta?
*          ¿Hemos sufrido burlas, maltratos o marginación por seguir a Jesús?  Explicar.
*          ¿De qué manera una persona puede “ganar al mundo” y “destruirse a sí mismo” (“perder su vida”)?
*          ”Sólo ganan la vida quienes la gastan en el servicio al prójimo y al Reino de Dios”. Comentar.
*          ¿Cuál es el mensaje del texto para nuestra vida hoy y qué podemos hacer en concreto para que se haga realidad en nuestra vida?

3)     ORACIÓN: ¿Qué le decimos a Dios después de escuchar y meditar su Palabra?
Ponemos en forma de oración todo aquello que hemos reflexionado sobre el Evangelio y sobre nuestra vida. Repetimos:Señor, ayúdanos a seguirte con fidelidad”.

4)     Contemplar el rostro de Dios encontrado en el texto y Comprometernos con la transformación de la realidad:
Compromiso: Estoy dispuesto a renunciar a…….. por causa del Reino de Dios. Nos llevamos una “palabra”.  Que esa “palabra” o versículo nos acompañe hasta que nos encontremos nuevamente.  Hagámosla presente mientras participamos en nuestros quehaceres diarios.

Oración final:
Padre Bueno, Tu Hijo Jesús no huyó ni retrocedió delante de la cruz. La hostilidad de sus adversarios no pudo apartarlo de su firme decisión de cumplir tu voluntad y anunciar tu Reino hasta las últimas consecuencias.  Fortalécenos con el don de tu Espíritu Santo para ser capaces de seguir a Jesús con valentía y fidelidad. Danos fuerzas para cargar la cruz de cada día. AMÈN.  
Padre Nuestro, que estás en el cielo…

Fuente: Sra Sara Pérez