
“Bautismo: la opción de Jesús”
11 de Enero de 2009: Ciclo Anual “B”
Bautismo del Señor: Evangelio de San Marcos 1, 7-11
San Marcos, el Primer Evangelio escrito, será nuestro guía este año 2009, en el Ciclo Litúrgico Dominical “B”; evangelio escrito para cristianos provenientes del paganismo, es decir, no judíos, que abre su puerta presentándonos la Buen Nueva (1,1)(como contenido: Evangelio; más tarde se llamará Evangelio al libro).
Tendrá unos 30 años. Va a bautizarse. Imagínelo integrándose en la catequesis de su hijo de 10 años, o tal vez inscrito en el Catecumenado de adultos. A Sergio le ha llamado la atención esta propuesta. Jesús ha escuchado hablar de Juan y se acerca al grupo que se reúne alrededor de este bautizador. Juan habla de un bautismo de lavado, purificación, conversión. Jesús como Señor no tiene necesidad de este bautismo pero quiere hacer este camino de identificación con nosotros. Para Sergio, aun con su edad, será el inicio de su vida como creyente. No sabe muy bien a que se enfrenta o que le pedirá, le exigirá, este nuevo paso. Está buscando al Señor (Is 55, 1-11: primera lectura de este domingo) sus caminos; respuestas. Tomando en cuenta las experiencias vividas quiere comenzar de nuevo. Nacer de nuevo. Y Jesús fue bautizado por Juan. Signos significativamente especiales acompañan esta celebración: el Espíritu Santo descendía sobre Él. ..una voz dijo: “Tú eres mi hijo muy amado”.
La vida de Sergio no es fácil. La propuesta de nacer de nuevo es fascinante pero un poco vaga; rehacer la vida con nueva óptica y valores parece difícil y casi inadecuada para nuestro tiempo. Lo primero que le exigen es el cambio de vida; una transformación que muestre que ha dado una paso nuevo, diferente, decisivo. Un cambio que tome como nuevo referente para su vida, al Señor Jesús encontrado en el Evangelio. Un cambio que fortalezca la referencia, relación, y la participación en el camino común de otros que buscan a Jesús y que se van a bautizar o que se han bautizado. El que cree que Jesús es el Cristo ha nacido de nuevo (1 Jn 5,1-9: segunda lectura de este domingo). Un cambio que diga con su vida la novedad que ha encontrado, que se deja ver en su alegría de haber nacido de Dios y saber y vivir como quien vence al mundo, con una nueva fuerza, esperanza y criterios para juzgar lo que vive y lo que le rodea. Sergio duda. No se anima a dar el paso. Por primera vez comienza a entender lo que significa ser bautizado: ser otro señalado, Ungido, Cristo, enviado. Ser como Jesús, el Cristo: lleno del Espíritu, Hijo muy amado de Dios. Se decido. Toma la opción de Jesús: Me bautizo. Ud.. ¿Ya se decidió? Pero.., ¡bautizados en nuestra sociedad somos muchos¡ Corrijo: “pasados por agua”, que en la infancia y por tradición nos bautizaron, de forma pasiva, ¡sí somos muchos¡. Bautizados como, Sergio, que opten, optemos por Jesús y su estilo de vida, un poco menos. ¿Es Ud. un bautizado con todas sus consecuencias? ¿Es Ud. un “pasado por agua”, bautismo infantil, de foto y fiesta, que no ha cambiado su vida? La opción de vivir como bautizado es decisión suya. Saludos.
P. Esteban Merino Gómez, sdb.
11 de Enero de 2009: Ciclo Anual “B”
Bautismo del Señor: Evangelio de San Marcos 1, 7-11
San Marcos, el Primer Evangelio escrito, será nuestro guía este año 2009, en el Ciclo Litúrgico Dominical “B”; evangelio escrito para cristianos provenientes del paganismo, es decir, no judíos, que abre su puerta presentándonos la Buen Nueva (1,1)(como contenido: Evangelio; más tarde se llamará Evangelio al libro).
Tendrá unos 30 años. Va a bautizarse. Imagínelo integrándose en la catequesis de su hijo de 10 años, o tal vez inscrito en el Catecumenado de adultos. A Sergio le ha llamado la atención esta propuesta. Jesús ha escuchado hablar de Juan y se acerca al grupo que se reúne alrededor de este bautizador. Juan habla de un bautismo de lavado, purificación, conversión. Jesús como Señor no tiene necesidad de este bautismo pero quiere hacer este camino de identificación con nosotros. Para Sergio, aun con su edad, será el inicio de su vida como creyente. No sabe muy bien a que se enfrenta o que le pedirá, le exigirá, este nuevo paso. Está buscando al Señor (Is 55, 1-11: primera lectura de este domingo) sus caminos; respuestas. Tomando en cuenta las experiencias vividas quiere comenzar de nuevo. Nacer de nuevo. Y Jesús fue bautizado por Juan. Signos significativamente especiales acompañan esta celebración: el Espíritu Santo descendía sobre Él. ..una voz dijo: “Tú eres mi hijo muy amado”.
La vida de Sergio no es fácil. La propuesta de nacer de nuevo es fascinante pero un poco vaga; rehacer la vida con nueva óptica y valores parece difícil y casi inadecuada para nuestro tiempo. Lo primero que le exigen es el cambio de vida; una transformación que muestre que ha dado una paso nuevo, diferente, decisivo. Un cambio que tome como nuevo referente para su vida, al Señor Jesús encontrado en el Evangelio. Un cambio que fortalezca la referencia, relación, y la participación en el camino común de otros que buscan a Jesús y que se van a bautizar o que se han bautizado. El que cree que Jesús es el Cristo ha nacido de nuevo (1 Jn 5,1-9: segunda lectura de este domingo). Un cambio que diga con su vida la novedad que ha encontrado, que se deja ver en su alegría de haber nacido de Dios y saber y vivir como quien vence al mundo, con una nueva fuerza, esperanza y criterios para juzgar lo que vive y lo que le rodea. Sergio duda. No se anima a dar el paso. Por primera vez comienza a entender lo que significa ser bautizado: ser otro señalado, Ungido, Cristo, enviado. Ser como Jesús, el Cristo: lleno del Espíritu, Hijo muy amado de Dios. Se decido. Toma la opción de Jesús: Me bautizo. Ud.. ¿Ya se decidió? Pero.., ¡bautizados en nuestra sociedad somos muchos¡ Corrijo: “pasados por agua”, que en la infancia y por tradición nos bautizaron, de forma pasiva, ¡sí somos muchos¡. Bautizados como, Sergio, que opten, optemos por Jesús y su estilo de vida, un poco menos. ¿Es Ud. un bautizado con todas sus consecuencias? ¿Es Ud. un “pasado por agua”, bautismo infantil, de foto y fiesta, que no ha cambiado su vida? La opción de vivir como bautizado es decisión suya. Saludos.
P. Esteban Merino Gómez, sdb.